Marcando tendencias- Aportaciones microempresariales

Dentro del proyecto "Tú marcas tendencias, Tú participas", que ya se lanzó hace un mes, estamos indagando y debatiendo sobre el papel de generación de contenidos por parte de las personas, algo que todos los que estamos en esto de la blogosfera, conocemos, pero que intentamos destripar para encontrar nuevos conceptos y posibilidades.

De los comentarios de los primeros posts, han surgido nuevas conversaciones, como no podía ser de otra manera. José María, nos acercaba de manera clara al papel de los usuarios de las empresas como generadores de contenidos, colaboradores de microcontenidos. Para ampliarlo más, me gustaría incluir también a las personas que están dentro de las organizaciones.

Uno de los apartados que más pueden verse implicados en esto de la participación activa de las personas, es el terreno empresarial. ¿Qué papel pueden desempeñar las personas en este universo de colaboración? ¿En qué medida pueden integrarse en los procesos, en las decisiones, en los beneficios....?

Durante cierto tiempo, las empresas han girado su cabeza hacia las personas, consideradas empleados, en otros casos RRHH(con perdón). Hacia fuera, las organizaciones han creado los fanáticos Focus Groups o estudio pseudopsicológico de la identidad y del comportamiento humano. En general, la decisión de incorporarles como generadores de contenidos, es muy reciente y los ejemplos prácticos son mínimos. Aunque muchas organizaciones intenten vender esa relación como existente, fructífera y desarrollada, en la mayoría de las ocasiones no es tal.

Recientemente, un directivo de una importante empresa, se empeñaba en convencerme del estupendo papel que su departamento de RRHH(con perdón), estaba llevando a cabo dentro de las políticas de relaciones con los empleados. Dejando a un lado, el concepto semántico, no estaba de acuerdo con él. Una cosa son las llamadas políticas de personas, con el objeto de "orientar" a las personas a un fin, que quizás no conozcan en su totalidad, y otra bien distinta es la relación de igual a igual con personas que tienen y sienten como suyo propio un espacio para aportar y compartir.

Él me indicaba que elegían aún al "empleado del mes", "la idea del mes" y todas estas ya conocidas políticas, que están ancladas en conceptos arcaicos sobre la participación de las las personas en entornos empresariales.

Premiar no es tan justo como hacer que las buenas ideas triunfen. Un empleado del mes, dificilmente repite...¿Y eso?, "es para dar más oportunidad a otros," dicen.... Entonces, el elegido no es el mejor, es "el mejor, sin tener en cuenta a los elegidos en los últimos 24 meses...". Estamos en otra época. Otra dimensión.

La generación de contenido por parte de los usuarios del entorno empresarial, debería contemplar:

-Un espacio de libertad, no dirigido, abierto desde dentro hacia fuera. Contemplado de forma horizontal independientemente de las personas que participen en él.

-La naturaleza de la Red, como herramienta de conversación. No es el tema de "la mejor idea", sino que "tengo una idea y vamos a compartirla para mejorarla". La propia red, estimula los proyectos positivos, y los hace libres, siempre y cuando se respete la horizontalidad.

-El desarrollo emocional de las personas, no sólo el económico, que también. La persona, es dueña de su talento. No esclava del mismo. Y es dueña.... ¿hasta donde?

-El acceso a la información, se muestra como elemento relevante. La transparencia empieza a ser percibida como desencadenante de potenciales conversaciones que inciden sobre los resultados empresariales.

-La presencia del Liderazgo natural, un liderazgo cambiante, no seleccionado, no discutido, a veces compartido, otras veces ausente. La naturaleza de la acción de las personas, orienta los procesos. Este punto, en la mayoría de las aproximaciones a la "open collaboration", se muestra como el más reticente. Pero es esencial. A liderazgo impuesto le sigue un fracaso de los objetivos.

Dejo en este momento abierto el debate y la ampliación de las ideas. ¿Cómo podemos orientar desde todos los puntos de vista, la generación de contenidos empresariales desde las personas hacia la organización? ¿Abierto?¿compartiendo los beneficios de las aportaciones?¿Cómo se remunera de forma emocional, de forma económica? ¿Qué apertura de Red utilizamos? ¿Todo transparencia?¿Y si generamos nuevos modelos de negocio, nuevos nichos, nuevas oportunidades, desde los usuarios, desde nuestros clientes?

El futuro de las organizaciones comerciales tiende a la persona, a la inclusión del valor real, no ficticio, a la horizontalidad de las ideas, a los contenidos por pensamiento, que no por posicionamiento. Pero ¿Cómo lo logramos?

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¿Existe la Innovación?

Escribe mi amigo Andrés una entrada muy interesante, que recomiendo leer y que me ha hecho pensar puesto que siempre me lleva a conceptos que me hacen preguntarme cada cosa mil veces.....y eso es bueno.

Andrés escribe:

""En realidad, y que me perdone mi amigo Dioni, creo que la innovación no existe, solo hay adaptación. Siempre digo, por ejemplo, que el Personal Branding es algo que existe desde siempre pero igual ocurre con muchas otras cosas"".

Cuando lees algo así, y si además viene de Andrés, al que admiro enormemente, te paras a pensarlo y tienes que reflexionar sobre todo el contexto en el que se mueve el artículo. A mi me parece interesante por lo menos preguntármelo. ¿Existe la Innovación?

Logicamente, creo rotundamente que sí. Lo que también es cierto es que "siempre ha existido". Esto también es importante mencionarlo. Siempre hemos tenido la innovación cerca de nosotros, no tan lejos, siempre presente.

La innovación ha evolucionado y no es considerada ahora una innovación algo que en el siglo XIX lo fuera. Ahora no tendría ninguna influencia, aunque sí su posible utilización dentro de un proceso o mediante un producto diferenciador o quizás utilizando unas herramientas tecnológicas que lo impulsaran hacia un lugar adelantado.

La innovación vivida con la revolución industrial fue determinante y clave para el desarrollo del mundo moderno y de los paises. La mayor parte de las innovaciones vividas en aquel momento tenían que ver con grandes fábricas, productos de fuerte calado industrial e industria pesada.

Posteriormente, hemos vivido innovaciones donde la importancia de los procesos hizo que los planteamientos industriales se revolucionaran. Hoy en día, esos cambios simplemente serían replicados en semanas por la competencia. Es lo que era Innovación Radical hace décadas, que hoy no pasa por una simple innovación incremental o adaptativa.

Al final del siglo pasado hemos asistido a innovaciones que fuertemente basadas en la tecnología, alumbraban nuevos modelos de negocios y grandes aperturas a nichos de mercado "emocionales", donde las personas percibían productos similares, pero "marketizados" de forma diferente. El poder de las marcas se hacía incontestable por su fortaleza en los medios, en los mercados y en la mente de los consumidores.

En estos momentos, éstas innovaciones pasadas, provocan limitados y muy efímeros éxitos. El tiempo en mercado de la innovación se ha acortado enormemente pero su impacto es fuerte durante la época que dura. Aunque hay excepciones, todavía inmersas en fortalezas de marca, cada vez se ven innovaciones más radicales en productos y modelos de negocio.

¿Cúal es la diferencia clara en estos casos de innovación que sí son consideradas radicales hoy? Sin duda, las personas, bien como individuos, bien como comunidades, pertenecientes a un grupo de trabajo o conectados por afinidad a un entorno social o simplemente mezclados entre otros diferentes o diversos a ellos. Lo realmente innovador es la posibilidad que la suma de personas, conectadas hacia dentro de su red social personal o profesional, pero abiertas a nuevas redes donde se incorpora el talento, generen innovaciones que no pueden hacerse en un laboratorio cerrado, en una empresa de tecnología encerrada en sus procesos o en un banco formado por ejecutivos 100 % similares.

La innovación radical hoy, aquella que modifica sustancialmente un mercado, una empresa o un proyecto, nace únicamente de la cooperación en conexión de personas diversas. Mientras empresas avanzan a pasos de tortuga adaptando mínimamente sus productos (en otro momento veremos si hacen lo correcto, ya que en algunos casos así es), otras dan saltos que les sitúan en nuevos niveles, mediante la innovación que parte y se comparte. La que las personas desarrollan.

La innovación, sin duda, SIGUE existiendo.

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La utilidad social de lo 2.0

Hacía un tiempo que no pasaba por aquí. Por razones principalmente personalesy porque soy de la opinión que hay que vivirlas de forma intensa y plena. Ahora intento reincorporarme a la vida personal, a la profesional y a la digital. Aunque, sin duda, la más dificil de las tres es esta última. Recomponer todas las conexiones, debates, ideas y conversaciones de la Red, es algo harto complejo, pero poco a poco he ido "poniendome al día".

Retorno a la vida digital leyendo un post de una profesional a la que admiro y a la que considero una de las mentes más avanzadas en desarrollo de la sociedad de la información en Red: Dolors Reig. En su caparazón, nos pone negro sobre blanco una de las inquietudes que más rondan mi cabeza en los últimos tiempos: La útilidad de lo 2.0. Es una entrada de obligada y sosegada lectura por su longitud, pero llena de densidad y conceptos que tenemos que analizar.

Sin entrar en un debate, si que entiendo que la utilidad de lo 2.0 radica en la colaboración de las ideas. Mezclando y rehaciendo conceptos existentes con un fin concreto y común. En mi experiencia, puedo indicar que se están produciendo avances en entornos empresariales y empiezan a aflorar iniciativas sociales dentro del ámbito de las instituciones, casi siempre mediante ejemplos locales.

Muy lejos aparecen las actividades de innovación y colaboración en el mundo de la educación, aunque se están tímidamente dando pasos, pero que chocan con la profunda pelea de poder que quieren establecer los ya situados en conceptos quizás anclados en el pasado. Este paso es imprescindible para un mejor futuro social y responsable.

Sin embargo, coincido y mucho con el espíritu del post: Tenemos que reorientar el fin común. Dotarle de unas características que van más allá de la Responsabilidad Social Corporativa, que sobrepasan las "limosnas sociales", vendidas como éxitos por los responsables de lo público. Y en mi opinión, coincidente con muchos escritos y estudios, es que tenemos que orientar nuestras acciones para la mejora del mundo y la sociedad en la que vivimos, no sólo nosotros, sino millones de personas que han vivido y viven en condiciones sociales no aceptables. Es por tanto, uno de los objetivos de la Innovación.

Y en nuestro entorno, la utilidad de la colaboración implica a las personas, que volcamos nuestro deseo de participación en nuevos proyectos, para que engloben a los que quieran aportar talento, imaginación y ética. Así, se están transformando empresas, instituciones y organismos, de cierta importancia. Estas actitudes de apertura en red, permiten modificar situaciones y a la vez mejorar, via colaboración, conceptos existentes, haciéndolos más cercanos y satisfactorios para las personas, los principales protagonistas.

Para re-comenzar, no ha estado mal. Ha sido como una expulsión de conciencia. Gracias Dolors por ayudarme a despertar.

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